Este fin de semana era uno de los más esperados por los fanáticos. Luke Rockhold, hasta hace poco campeón del peso medio, volvía al octágono tras más de un año de ausencia. El UFC Fight Night 116 que tuvo lugar en el PPG Paints Arena de Pittsburgh tuvo una prometedora cartelera, en la que el californiano fue la principal atracción.

Desde su derrota ante el británico y actual monarca de la división, Michael Bisping, Rockhold (16-3) no había vuelto a combatir, por lo que las expectativas de esta velada eran altas. Su rival no era un cualquiera. David Branch (21-4), que en su etapa en WSOF (ahora llamada PFL) se consagró como campeón en dos divisiones hasta que firmó por la UFC. Branch sumaba 11 victorias consecutivas desde que perdiera en mayo de 2012 ante el todopoderoso Anthony Johnson por decisión. ¡5 años sin conocer la derrota! Mientras que el miembro del equipo AKA había sufrido la derrota más dolorosa de su carrera. Por que su combate con Bisping, no debió haberse dado en un principio. Hay que recordar que Rockhold se suponía que iba a defender su cinturón ante la misma persona a la que se lo arrebató, Chris Weidman. Pero el destino siempre depara sorpresas, y Weidman cayó lesionado 2 semanas antes del combate. El resto ya lo conocemos todos.

Volviendo a la velada que se disputó este fin de semana, Rockhold entró cómo gran favorito en las apuestas de Las Vegas, e hizo valer su condición de favorito. Aunque eso si, primero le tocó sufrir. Tras todo el trash talk previo al combate, vimos como David Branch salía con mucha energía buscando noquear a su contrincante. Rockhold le castigaba a base de patadas,tanto a las piernas como a las costillas, pero vimos al underdog a un mejor nivel. Branch logró conectar una serie de puños terrible que aturdió a Rockhold, pero logró sobreponerse. De paso consiguió demostrar que su mandíbula era más dura de lo que observamos en el combate ante Bisping (una de las cosas que le echaba en cara Branch en el trash talk). En el segundo asalto Rockhold impuso su wrestling en el combate, derribando varias veces a su contrincante. En uno de los derribos logró coger la montada y a base de golpes logró que el arbitro detuviera el combate. Rockhold fue considerado vencedor por sumisión, ya que el de Brooklyn palmeó a modo de rendición al ver que no le quedaba otra opción y el referí no detenía la pelea.

Con la división de peso medio parada por la irrupción de Georges St.Pierre y su pelea en el UFC 217 ante Bisping, Rockhold tiene un panorama poco apropiado para sus intereses. Además Robbert Whittaker que está lesionado, es el campeón interino de la división, de modo que se le supone el próximo en ir a pelear por el título. Pero esto es la UFC moderna, y los títulos ya no cuentan. Ahora solo interesan las money fights de modo que habrá que ver que sucede en esta atascada división.

En el evento co-estelar vimos una pelea entre dos pesos welters: Mike Perry (11-1) y Alex Reyes (13-3). A causa del huracán Irma, Thaigo Alves no pudo coger el avión que le llevaría desde Florida hasta Pennsylvania, por lo que Reyes le sustituyó con unos pocos días de antelación. Este fue el debut de Reyes en la promoción, tan solo un mes después de su último combate en la promotora FCOC, y no le pudo ir peor. Perry es una bestia, con un poder de nocaut digno de los mejores y con la intensidad del mismísimo Robbie Lawler. Nada más comenzar la pelea se lanzó a matar a su oponente. Fue conectando golpes terribles hasta que se enzarzaron en el clinch. Entonces aprovechó que Reyes había agachado la cabeza y le conectó un espectacular rodillazo que acabó el combate. Tan solo le hicieron falta 1 minuto y 19 segundos para volver a demostrar una vez más que con el tiempo (solo tiene 26 años) será uno de los atletas más temidos de la división. Si es que no lo consideran ya como tal. 11 victorias, todas ellas por KO (4 de ellas en la UFC) suma ya Perry. En la entrevista aprovechó para pedir una pelea ante Robbie Lawler, algo que dudo mucho que suceda, pero que habla muy bien del hambre que tiene este chico.

Un combate que esperaba con ganas fue el que enfrentó a Krzysztof Jotko (19-3) y Uriah Hall (13-8) en las preliminares. Y no defraudó para nada. Hall estaba en una dinámica muy negativa, sumaba 3 derrotas seguidas y una cuarta hubiera sido terrible para él. Pero si nos ponemos a pensar la calidad de los rivales con los que perdió (Whittaker, Derek Brunson y Gegard Mousasi) tal vez no estuviera en tan mala situación. Por su parte Jotko había perdido su última pelea, ante David Branch, pero antes de aquel combate había obtenido 5 triunfos al hilo, por lo que partía cómo favorito en este combate.

En el primer round el polaco conectó muchos golpes que aturdieron a su rival. Después derribó a Hall y fue castigándole en la lona durante todo el asalto. Intercambiaba ground & pound con intentos de sumisiones. Logró coger la montada al finalista del TUF 17, pero no por mucho tiempo. Al escapar Hall, Jotko le cogió la espalda y le aplicó un mataleón que no llegó a cuajar y poco después volvieron al intercambio de pie, así finalizaron los 5 minutos. Hall no sabía cómo había logrado escapar, y los aficionados nos quedamos atónitos ante el coraje del jamaicano. En el segundo asalto el combate se desarrolló de pie. A los dos minutos Hall conectó un derechazo que tumbó a Jotko. Entonces se abalanzó al suelo para rematar la faena con varios puños más y el árbitro detuvo el combate. ¡Menudo comeback el que logró Hall!

En el resto de la cartelera destacaron varias peleas:

Hector Lombard (34-8-1, 2 NC) sigue sumando derrotas, y ya lleva 4 consecutivas. Esta vez fue Anthony Smith (28-12) el que le venció. Y eso que Lombard estuvo a punto de finalizarle en el primer round, pero finalmente en el último parcial Smith logró conectar una serie de puños que acabaron con el cubano.

Kamaru Usman (11-1) se mostró tal y cómo el mismo dijo, cómo un problema en la división. Sumaba 5 victorias en la UFC antes de este enfrentamiento, pero solo había finalizado una de ellas, algo que le podía lastimar a la hora de que le pusieran un oponente de entidad. Pues no necesito ni un asalto esta vez para volver a demostrar lo buen peleador que es. Dominó el combate y finalizó a Sergio Moraes (12-3-1) con un golpe de derechas directo a la mandíbula.

Estos fueron los resultados del UFC Fight Night 116:

• Luke Rockhold venció a David Branch vía Sumisión (Golpes) Round 2 (4:05)
• Mike Perry venció a Alex Reyes vía KO (Rodillazo) Round 1 (1:19)
• Anthony Smith venció a Hector Lombard vía TKO (Puños) Round 3 (2:33)
• Gregor Gillespie venció a Jason Gonzalez vía Sumisión (Triángulo de Brazo) Round 2 (2:11)
• Kamaru Usman venció a Sergio Moraes vía KO (Puño) Round 1 (2:48)
• Justin Ledet venció a Zu Anyawu vía Decisión Dividida (28-29, 29-28 y 29-28)
• Olivier Aubin-Mercier venció a Tony Martin vía Decisión Dividida (28-29, 29-28 y 29-28)
• Daniel Spitz venció a Anthony Hamilton vía TKO (Puños) Round 1 (0:24)
• Uriah Hall venció a Krzysztof Jotko vía KO (Puños) Round 2 (2:25)
• Gilbert Burns venció a Jason Saggo vía KO (Puño) Round 2 (4:55)

Los bonus de la noche fueron a parar a manos de Mike Perry y Uriah Hall, que obtuvieron el bonus a desempeño de la noche. Mientras que la mejor pelea del evento fue la que protagonizaron Gregor Gillespie y Jason Gonzalez.